RENAMU: Infraestructuras culturales municipales

Sistema alternativo de información cultural

¿Tu distrito cuenta con teatro municipal, museo o casa de la cultura? Consulta los datos oficiales del INEI en nuestro panel interactivo.

La ausencia como dato: lo que revelan las cifras oficiales

El Registro Nacional de Municipalidades (RENAMU) es el censo anual que realiza el INEI a las 1,891 municipalidades del país, recogiendo información detallada sobre los servicios, infraestructuras y capacidades institucionales municipales. En el ámbito cultural, registra específicamente teatros, casas de la cultura, museos, bibliotecas y otros locales culturales municipales.

Diccionario de datos – RENAMU 2024 (INEI)

Desde nuestra experiencia analizando ecosistemas culturales en Lima Metropolitana —donde hemos mapeado más de 500 espacios culturales— sabemos que los datos oficiales solo capturan una fracción de la realidad cultural territorial. Sin embargo, estas cifras son fundamentales para entender la magnitud del desafío que enfrentamos como país.

Los datos del RENAMU 2024 nos permiten conocer cuánta infraestructura cultural formal existe y cómo se distribuye territorialmente, revelando brechas estructurales que afectan el ejercicio de derechos culturales en el territorio nacional.

En Nodos Culturales creemos que el acceso a la información cultural es una herramienta de justicia territorial. Por eso, hemos desarrollado esta herramienta para poner a disposición del público una lectura accesible y crítica de los datos del Registro Nacional de Municipalidades (RENAMU), producidos por el INEI.
Esta herramienta convierte una base de datos técnica en un recurso ciudadano, permitiendo que cualquier persona —sin necesidad de descargar archivos ni manejar software estadístico— pueda consultar cuántas infraestructuras culturales existen en su distrito, qué tipo son y si cuentan con gestión pública local.

RENAMU - Infraestructuras Culturales

Explora datos de infraestructuras culturales municipales del Perú

1,891
Municipios
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📍¿Faltan datos en tu distrito?
Esta herramienta se basa en información oficial del INEI, pero sabemos que los registros oficiales no siempre capturan toda la riqueza de lo cultural. Por eso, complementamos esta lectura con procesos de cartografía cultural participativa que hacen visibles los espacios, saberes y dinámicas culturales que no aparecen en los registros oficiales. Saber más.

Plataforma Nacional de Datos Abiertos

Repositorio oficial del Estado Peruano con datos de todas las instituciones públicas a nivel nacional. Saber más

Bibliografía recomendada

Nodos Culturales ha seleccionado una serie de informes y reportes que vinculan arte, cultura, desarrollo, políticas culturales. Saber más

¿Qué significan estos datos?

Los datos RENAMU 2024 sobre los 1891 municipalidades del Perú nos permiten activar preguntas críticas: ¿Qué regiones concentran estos equipamientos? ¿Qué zonas enfrentan mayores vacíos institucionales? ¿Cómo estas diferencias inciden en el acceso efectivo a la vida cultural desde lo público?

594

municipalidades cuentan con infraestructura cultural:
7 de cada 10 no tieneninguna

Si solo contamos Casas de la cultura, Museos municipales y Teatros municipales, esto se reduce a 234 municipalidades: el 12% de todo el Perú.

27% de distritos

tienen biblioteca municipal

56 distritos tienen bibliotecas sin uso.

7% de distritos

tiene casas de la cultura

134 municipalidades reportan contar con al menos una casa de la cultura.

4% de distritos

tiene teatros municipales

Solo 76 municipios a nivel nacional reportan contar con teatro municipal

6% de distritos

tiene museos municipales

La infraestructura cultural: un privilegio urbano

  • Más de dos tercios de los 1891 municipios peruanos (68.6%) no cuentan con ninguna infraestructura cultural.
  • El grueso de distritos (408) cuenta solo con 01 equipamiento.
  • Solo 2 distritos en todo el país tienen 10 o más equipamientos municipales (Miraflores y Cercado de Lima)

Distribución de Infraestructuras Culturales por Municipio

Fuente: RENAMU 2024 (INEI) - Análisis Nodos Culturales

Más allá de los números: el impacto territorial de estas brechas

Los datos del RENAMU por región evidencian cómo estas brechas estructurales se distribuyen desigualmente en el territorio confirmando tres problemáticas estructurales:

Los límites de los datos oficiales: un diagnóstico compartido

El Ministerio de Cultura reconoce explícitamente que los datos del RENAMU presentan limitaciones importantes para comprender la realidad cultural territorial completa debido a que los registros oficiales no están diseñados para capturar. En la Ficha Técnica del Diagnóstico de Brechas de Infraestructura Cultural (2023), en cuanto al indicador Porcentaje de infraestructura cultural pública por implementar, se señalan las siguientes limitaciones:

  • “A la fecha no se tiene un estándar internacional sobre el número de infraestructuras públicas culturales que debería tener un ámbito geográfico determinado (número de casas de la cultura o teatros por país, por región, por distrito o por número de pobladores).
  • Para determinar el universo de infraestructuras culturales se toma la cifra reportada en el Registro Nacional de Municipalidades (RENAMU), un registro que, aunque cuenta con una serie estadística, presenta limitaciones, tales como la disminución en las cifras presentadas para el número de infraestructuras culturales o el año de referencia.
  • Una de las principales debilidades de la fuente utilizada, RENAMU, es que no integra otro tipo de espacios culturales que son comúnmente muy valorados en el ámbito local, como los centros culturales que también ofertan diversos tipos de actividades. Por ello, una mejora de este registro, puede ser la inclusión de nuevas tipologías para obtener un universo más robusto y cualificado de este tipo de infraestructuras.”

El problema de estas limitaciones es que la única fuente para sustentar políticas públicas y proyectos de inversión es precisamente RENAMU.

El caso Lima: midiendo la magnitud de lo invisible

Desde nuestra experiencia cartografiando Lima Metropolitana, sabemos que la ausencia de infraestructura formal no significa ausencia de espacios culturales. Pero ¿qué tan grande es realmente la porción de realidad que los registros oficiales no capturan?

Los números evidencian estas limitaciones con contundencia: el RENAMU 2024 registra 107 locales de uso cultural administrados por municipalidades en Lima Metropolitana (bibliotecas, casas de la cultura, museos, teatros y otros), mientras que nuestra Cartografía Cultural de Lima 2025 ha identificado más de 530 espacios culturales activos —incluyendo gestión municipal, estatal, sociedad civil, privada e institucional, con predominio claro de la sociedad civil.

Esta ​brecha de 6 a 1​ revela que los registros oficiales capturan solo el 16.5% de la realidad de los espacios culturales de Lima.​

Espacios culturales por cada 10,000 habitantes

Registro oficial vs realidad territorial en distritos seleccionados de Lima Metropolitana

RENAMU 2024
Nodos Culturales 2025
6:1
Por cada espacio registrado en RENAMU,
existen 6 espacios documentados por Nodos Culturales

Fuentes: RENAMU 2024 (INEI) | Cartografía Cultural de Lima 2025 (Nodos Culturales)

Si esta proporción se mantuviera en otras regiones del país, considerando que Lima tiene presumiblemente mayores capacidades institucionales de registro, significaría que por cada infraestructura municipal que aparece en el RENAMU, podrían existir entre 5 y 6 espacios culturales no contabilizados a nivel nacional.

Esta disparidad no es solo cuantitativa: revela diferencias cualitativas fundamentales en los modelos de gestión cultural que dinamizan el territorio. El análisis espacial de Lima evidencia tres patrones críticos:

  1. Los espacios autogestionados y comunitarios son el modelo cultural dominante en la práctica, no la excepción. Mientras los registros oficiales los invisibilizan completamente, estos espacios constituyen la columna vertebral del ecosistema cultural, especialmente en zonas con menor inversión pública.
  2. La gestión cultural se distribuye territorialmente de manera desigual. Los espacios estatales, municipales e institucionales se concentran casi exclusivamente en el centro de la ciudad, mientras la oferta privada se restringe a zonas de alta capacidad adquisitiva. En contraste, los espacios autogestionados y los espacios públicos —invisibles para RENAMU— son los que sostienen la vida cultural en periferias populares.
  3. La ausencia en el registro oficial no significa ausencia de vida cultural. Como documentamos en nuestra Cartografía Cultural de Lima 2025, las comunidades desarrollan ecosistemas culturales robustos utilizando espacios alternativos: losas deportivas, parques, comedores populares, viviendas adaptadas.

Hacia metodologías más democráticas de información cultural

Los datos del RENAMU 2024 y el análisis comparativo en Lima Metropolitana evidencian la necesidad urgente de sistemas de información cultural más complejos y participativos. La brecha de información no es un obstáculo insalvable: es una oportunidad de complementariedad. Los datos oficiales del RENAMU proporcionan una línea base importante sobre infraestructura municipal de acceso público. Las metodologías participativas como las cartografías culturales permiten completar el panorama territorial con información sobre el ecosistema cultural integral, reconociendo la diversidad real de prácticas, espacios y modelos de gestión que dinamizan los territorios.

Ambas fuentes son necesarias. Ninguna es suficiente por sí sola.

Desde nuestra experiencia desarrollando cartografías culturales en Lima, sabemos que las métricas tradicionales invisibilizan la riqueza de ecosistemas culturales territoriales. La experiencia internacional y local demuestra que registros culturales más completos y democráticos requieren:La experiencia internacional y local demuestra que registros culturales más completos requieren:

  • Indicadores culturales territoriales que capturen la diversidad real de prácticas y espacios culturales
  • Metodologías participativas de levantamiento de información que reconozcan saberes comunitarios
  • Plataformas colaborativas que permitan actualización constante de datos culturales
  • Análisis intersectoriales que vinculen cultura con desarrollo urbano, educación y bienestar social

Estas metodologías ya se están implementando en diversas ciudades latinoamericanas y pueden adaptarse al contexto peruano para generar información cultural más democrática y útil para la toma de decisiones.

Conclusión: datos culturales para decisiones informadas

Los datos del RENAMU 2024 confirman que el Perú enfrenta una deuda histórica en infraestructura cultural municipal. El análisis comparativo en Lima Metropolitana demuestra que las brechas reales son hasta 6 veces mayores de lo que sugieren los registros oficiales. Esta proporción —que probablemente se amplía en regiones con menores capacidades de registro— evidencia que cualquier política pública basada únicamente en datos del RENAMU estará sistemáticamente subestimando las necesidades territoriales y los modelos de gestión cultural que ya existen.

Pero estos datos también revelan una oportunidad: la de diseñar políticas culturales desde una lectura territorial más completa, accesible y participativa.

El desafío: información cultural democrática

El desafío que enfrentamos no es solo técnico: es político. Se trata de decidir qué queremos medir, quién tiene derecho a producir conocimiento sobre lo cultural, y para qué fines se utilizará esa información.

Un sistema de información cultural democrático no puede limitarse a contar equipamientos: debe ser capaz de visibilizar la diversidad de formas en que las comunidades producen, circulan y se apropian de la cultura en sus territorios. Debe reconocer que el ejercicio de derechos culturales ocurre tanto en teatros municipales como en plazas públicas, tanto en museos formales como en murales callejeros, tanto en bibliotecas oficiales como en círculos de lectura comunitarios.

Los datos oficiales son necesarios, pero son sistemáticamente insuficientes. Necesitan complementarse con registros participativos que reconozcan la diversidad real de prácticas culturales, especialmente aquellas sostenidas por comunidades en zonas con menor inversión pública. Una gestión cultural efectiva —en lo público, lo comunitario o lo independiente— requiere información accesible, contextualizada y accionable que integre múltiples fuentes y perspectivas.

Nuestro compromiso: datos culturales para decisiones informadas

En Nodos Culturales creemos que el valor de los datos no reside solo en su disponibilidad, sino en su capacidad para abrir preguntas, identificar vacíos y activar decisiones con sentido territorial. Por eso desarrollamos metodologías especializadas que permiten comprender en profundidad los ecosistemas culturales, cruzando fuentes oficiales con análisis de datos y cartografías culturales.

Sabemos que los datos por sí solos no bastan: necesitan ser interpretados desde las realidades locales, las trayectorias culturales y los saberes comunitarios. Que la accesibilidad cultural territorial no puede reducirse a mediciones de distancia-tiempo, sino que requiere marcos conceptuales que articulen justicia espacial cultural y planificación urbana. Y que la triangulación entre registros oficiales, datos participativos y técnicas espaciales muestra su potencial para enriquecer la comprensión de los ecosistemas culturales y orientar políticas más inclusivas.

Si formas parte de una municipalidad, una organización, una empresa o un equipo de investigación, y quieres ir más allá de los indicadores disponibles, estamos listas para acompañar ese proceso. Escríbenos a hola@www.nodosculturalesperu.com


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