Cultura, datos y territorio: una experiencia de formación en El Agustino

En Nodos Culturales trabajamos desde una convicción clara: los proyectos culturales no nacen de la nada, sino de las realidades que los rodean. Por eso desarrollamos metodologías de formación que integran cultura + datos + tecnología + pensamiento crítico, para que los agentes culturales puedan leer su territorio con mayor profundidad y diseñar desde allí intervenciones significativas.

Ese enfoque guio el taller “Herramientas territoriales para proyectos culturales”, realizado junto a SEA Perú en El Agustino, donde durante dos sesiones acompañamos a artistas, educadores y gestores culturales a descubrir cómo la evidencia puede fortalecer sus ideas creativas y convertirlas en proyectos con sentido local.

Cuando los datos dejan de ser fríos y se convierten en aliados de tu proyecto cultural

La propuesta pedagógica de Nodos Culturales se basa en la convicción de que los proyectos culturales no están en el aire; están anclados en territorios concretos, con personas reales y problemáticas específicas.

Por ello, este taller no se enfocó en enseñar a “postular a concursos”, sino en pensar mejor los proyectos: mirar el territorio con nuevos ojos, comprender sus dinámicas y traducir esa lectura en decisiones creativas, estratégicas y sostenibles.

Aunque el Perú cuenta con una amplia oferta de datos abiertos, la mayoría de plataformas están diseñadas para perfiles técnicos y no para la ciudadanía. Esta inaccesibilidad termina generando exclusión: quienes no dominan el lenguaje estadístico o las interfaces digitales quedan fuera de la posibilidad de interpretar su propio territorio.

Una parte central de nuestra metodología consiste en democratizar el acceso a los datos, mostrando que también pueden ser sensibles, intuitivos y culturalmente potentes. No enseñamos estadística: enseñamos a leer el territorio a través de los datos y a reconocer en ellos historias, tensiones y oportunidades.

Construir un perfil socio–cultural desde la comunidad

Una de las experiencias más significativas fue la construcción colectiva del Perfil Socio–Cultural de El Agustino.

Trabajamos con nueve fuentes públicas —INEI, ENAPRES, RENTOCA, MEF, RENAMU, ESCALE, entre otras— para responder preguntas clave sobre el distrito:

  • ¿Cómo es la población que vive aquí?
  • ¿Cuánto invierte realmente la municipalidad en cultura?
  • ¿Qué espacios públicos existen y cómo se usan?
  • ¿Cuántos artistas, gestores u organizaciones culturales hay en el distrito?
  • ¿Qué tan activa es la participación cultural de la población?
  • ¿Qué tan activa es la participación cultural?

Lejos de ser un ejercicio técnico, la elaboración del perfil se convirtió en un espacio donde los datos conversaron con la experiencia: lo que los participantes sabían del barrio encontró resonancia (y a veces contradicción) con la evidencia. Esa fricción abrió espacio para nuevas preguntas, nuevas interpretaciones, nuevas capas de análisis, detectar oportunidades y una mirada más amplia sobre la vida cultural del distrito.

El resultado fue un documento vivo, construido a muchas manos, que hoy puede servir como insumo para diagnósticos, proyectos, políticas locales o iniciativas comunitarias.

Leer el territorio para diseñar proyectos (y políticas) con sentido

Con el perfil territorial como base, acompañamos al grupo a transformar los hallazgos en propuestas culturales más contundentes. El ejercicio central consistió en trabajar sobre un proyecto existente, identificar sus puntos ciegos y reformularlo desde la evidencia.

Esto permitió:

  • identificar problemáticas reales, no solo intuiciones;
  • reconocer nuevos actores en juego: familias, adultos mayores, instituciones educativas, organizaciones barriales.
  • explorar nuevas líneas de acción dentro y fuera del campo cultural;
  • vincular el proyecto a otros sectores que trabajan problemáticas similares (educación, juventudes, convivencia, salud mental);
  • asociar el proyecto con líneas de financiamiento alternativas, y no a una sola línea concursable.
  • identificar aliados institucionales, no necesariamente del sector cultural, que abordan problemáticas similares (educación, juventudes, salud comunitaria, convivencia, etc.).

También permitió pensar la estigmatización cultural —como la que atraviesa hoy al hiphop— desde un enfoque más amplio: no solo desde la voz de quienes crean, sino desde los imaginarios y prejuicios de quienes los observan. Los datos, la discusión colectiva y el análisis crítico permitieron comprender que los proyectos culturales pueden intervenir en ambos sentidos.

El aprendizaje clave fue que no se trataba de cómo postular mejor, sino de cómo hacer nuestros proyectos más pertinentes: cómo lograr que un proyecto dialogara con su territorio, con sus actores y con su complejidad.

Una pedagogía que apuesta por la autonomía y el pensamiento crítico

Los datos no fueron un fin, sino un punto de partida para activar:

  • pensamiento crítico,
  • sensibilidad territorial,
  • capacidad de análisis,
  • y una lectura más estratégica de la gestión cultural.

A través de preguntas insistentes, interpretaciones colectivas y debates guiados, se logró romper miradas únicas sobre las problemáticas, ampliando la comprensión del rol que puede tener la cultura en contextos urbanos atravesados por desigualdades, estigmatización y fragmentación social.

El taller confirma que existe una demanda creciente no solo por saber cómo diseñar un proyecto técnicamente correcto con objetivos, actividades, presupuestos, sino también cómo diseñarlos de manera que tenga sentido y potencial transformador.

Por eso, en Nodos Culturales apostamos por metodologías culturales que combinen evidencia y sensibilidad, acerquen los datos a las comunidades, fortalezcan la autonomía de los agentes culturales, y ayuden a diseñar proyectos con sentido territorial y estrategia pública.

Este tipo de procesos puede aportar valor a gobiernos locales, instituciones educativas, organizaciones sociales, programas de cooperación y colectivos que buscan trabajar desde la cultura con mayor rigor, impacto y sostenibilidad.

En Nodos Culturales no solo enseñamos herramientas: acompañamos a mirar el territorio con otros ojos y a construir proyectos capaces de transformar realidades desde la evidencia y la emoción.

Published On: 13 de octubre de 2025 / Categories: Talleres / Tags: /